jueves, 31 de octubre de 2013

Experiencias de lectura





La mediación lectora requiere, en primer lugar, el gusto por los libros de parte de quién dirige las actividades. En este caso expondré algunos libros que si bien no he tenido la experiencia de leerlos en actividades de animación lectora, considero apropiados para ello pues, me agradan, y además me parecen muy interesantes de trabajar sobre todo en grupos de niños y jóvenes.


"Millones de gatos" 
Wanda Gág. 
Libros del Zorro Rojo, 2011

Este es un libro que llama la atención por la fuerza de los colores puros que tiene su tapa, colores que en primera instancia esperé encontrar dentro del texto. Para mi sorpresa, lo que descubrí fue una historia con matices clásicos y que deja entrever su data (1928) a través de un comienzo usual (“Había una vez…”) y un uso más bien tradicional de la ilustración que acompaña la lectura del texto. Después de leer el libro completo, considero que el uso del blanco y negro interior es adecuado pensando en la simpleza con que todo está trabajado en el libro. Texto e imagen están a un mismo nivel de entrega de información. El texto aporta sonoridad, ritmo, poesía; la imagen entrega detalles visuales que si bien son mencionados por las palabras, son ricos en texturas y formas, además de desatacar el uso de la técnica del grabado para aumentar el efecto rítmico de la palabra. La autora hace un uso del espacio que apoya y fortalece el ritmo de la narración, empleando maravillosas doble-páginas que recorren el espacio tal cual lo hace el protagonista y sus gatos a lo largo de la historia.
El autor busca entregar un mensaje valórico al espectador, lo que hace a través de toques de humor y de manera sutil, a través de hechos concretos que son narrados en el cuento. Es un libro muy adecuado para ser leído en voz alta, sobre todo a niños pequeños que fácilmente son atraídos a través de la reiteración de frases con las que ellos mismos pueden ser partícipes de la narración. Me gustó mucho pues considero que no es un libro ambicioso, sino simple en toda su amplitud, perfecto para pequeños desde 5 años aproximadamente. Da la posibilidad de indagar en temáticas complejas como la ambición, la belleza, la compañía, sin plantearlo de manera violenta, agresiva, ni menos invasiva, sino a través del humor y la simpática idea de verse rodeado de “cientos de gatos, miles de gatos, millones y billones y trillones de gatos”

El corazón y la botella, 
Oliver Jeffers. 
FCE, 2010

Este fue uno de los primeros libro álbum que conocí hace un par de años, sin saber eso de la doble codificación. Mi primera impresión, en ese momento, fue que el libro se trataba de una mujer que cuando pequeña había sufrido por algo y encarceló su corazón en la botella para que no le volviera a suceder, hasta que cuando quiso volver a usarlo le costó un poco y tuvo que recibir ayuda para finalmente sacarlo.
Grande fue mi impresión cuando descubrí que la herencia cultural literaria me estaba jugando una mala pasada ya que, por la costumbre textual que arrastraba hasta entonces, había obviado detalles que las imágenes entregaban y que me permitían darle un sentido nuevo al libro. Había un personaje que no identifiqué pues no puse suficiente atención a lo visual en el primer momento y que permitía entender por qué la protagonista había decidido cuidarse del dolor, ¿de qué dolor? De la pérdida de quién le heredó la curiosidad por el mundo. Me gustó aún más cuando descubrí los secretos que en un principio había ignorado.
El autor nos propone un viaje a lo más íntimo del dolor de la protagonista que pierde aquella figura que la invitaba a soñar, a través de los ojos de una niña con la que comienza la narración, para terminar en los ojos de otra niña –o tal vez la misma- con la que termina la historia. Nos invita a ser curiosos como ella y recorrer hasta el último rincón de la hoja para conocer en detalle a los personajes y sus mundos internos.

"El árbol rojo"
Shaun Tan. 
Barbara Fiore Editora, 2010

La primera impresión que el libro me dejó fue destacar el nivel de expresividad que el autor deja escapar en cada una de sus ilustraciones. El libro me gustó muchísimo porque logra muchas cosas. En primer lugar logra conmover a través de ilustraciones que engrandecen los significados de las palabras hasta el punto de conmovernos. Estoy segura que por lo menos una de las imágenes te hará pensar en aquel momento en que no tienes esperanzas, esperas y esperas… las imágenes no solo están bien hechas en cuanto a lo técnico, sino también en cuanto al logro editorial: en relación a tamaños, ubicación, colores, impresión, todo. Y su relación con el texto es magistral: ilustran el alma de un personaje que se encuentra agobiada, oscura y nostálgica como los colores y los monstruos que aparecen al recorrer las hojas.
El autor nos da esperanza en la vida, las usadas expresiones “después de la tormenta viene la calma” o “no hay mal que dure cien años” desaparecen ante esta exquisita oportunidad de reinvención de la esperanza que Tan nos regala a través de este conmovedor libro en el que el color se emplea de manera inteligente, intnesa, expresiva.

“Axolotl"
Julio Cortázar. En Final del Juego
Alfaguara, 2007.

 ¿Cómo es ese extraño animal? Tal como lo describe el personaje: increíble, a lo menos curioso, un  poco mágico y por cierto, digno de un cuento como este. “Axolotl” es un cuento que me gustó mucho, en primer lugar, por darme la posibilidad de conocer este extraño bicho  que me causó tanta curiosidad como creo, debe haberle causado al escritor para llegar a una historia como esta. Luego, es imposible no hablar de aquella magia con la cual el escritor nos hace transformarnos a cada uno de nosotros –o ellos- desde ser espectadores a ser los observados – o al revés.
Cortázar tiene la destreza de cambiarnos de sitio (“La señorita Cora”, “La continuidad de los parques”) cada vez que lo considera necesario. Lo bueno de ello es que pese a no ser su único intento, esta vez lo logra desde un juego en el que nos sitúa en una vitrina que sin darnos cuenta, gira, se transforma en espejo, cambiando el rol del protagonista de manera sutil para llegar finalmente a transformarlo completamente, al mismo tiempo que nos mueve a nosotros, lectores.
El texto me deja una sensación de identificación, nos permite conocer a un personaje si bien no se describe en el texto, se reconoce de tal manera en estos extraños,  pensativos e infelices animales casi humanos, levemente humanos, delicadamente vegetales que los descubre dentro de sí mismo, en sí mismo, es uno de ellos.
En razón de esta temática con tintes de identidad, de crítica, de búsqueda, considero que es un texto adecuado para ser abordado en la adolescencia, desde los quince años aproximadamente. Si bien su estructura narrativa presenta un grado de complejidad, puede ser uno de aquellos desafíos literarios que Trelease nos invita a hacer con los estudiantes a quiénes no debemos subestimar.

Bibliografía
Cortázar, Julio. “Axolotl”  En Final del Juego. Alfaguara 2007
Gág, Wanda. “Millones de gatos”  Libros del Zorro Rojo, 2011.
Jeffers , Oliver. “El corazón y la botella”  FCE, 2010
Tan, Shaun. “El árbol rojo” Bárbara Fiore Editora, 2010.
Trealease, Jim “Manual de la lectura en voz alta” Fundalectura, 2004

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